lunes, 16 de febrero de 2009

La maté porque era mía...

Sí, debo confesarlo, cometí el peor de los actos que un ser humano puede hacer... cometí un asesinato, la maté, por la noche, cuando nadie lo podía imaginar...

Todo el mundo nos miraba y pensaba que éramos completamente compatibles, que no nos imaginaban al uno sin el otro, que habíamos nacido para morir juntos, para complementarnos, que éramos ideales...

Pero no pude aguantar más, dicen que un hombre no puede aguantar más que aquello que desea aguantar, y no quise aguantar más, ya había pasado suficiente con ella, siempre me había guiado bien por el mundo, me había descubierto caminos y salidas que estoy seguro que nunca habría descubierto... pero aquel día se sobrepasó en todo lo que podía hacer: 

- "No" - Me dijo.

Y si, en ese momento acabe con ella, impulsivamente y sin ningún remordimiento...

La mate porque era mía, he acabado con la razón, señor agente.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Esto me suena..
Puede ser?

Muaks ^^

calcetinrayado dijo...

Buff los pelos de punta... es increible que alguien pueda pensar así... y los hay, y recientemente algunos casos reales Y_Y

asdeoz dijo...

pues no acabes con ella, deja k a veces te guíe...

cuidala